Ministros Enfocados (En honor a mi amigo Pablo)



MINISTROS ENFOCADOS
(El balance entre el ser y el hacer en la vida del ministro latinoamericano)
Era la una de la mañana aproximadamente de un día cualquiera, cuando un vecino y consiervo tocó la puerta de mi casa. Entre dormido y despierto, abrí; y allí junto a mi vecino estaba un hombre  quien a duras penas pude saludar y me lo presentaron como Pablo Gutiérrez. Sin mucho protocolo pronto cada uno se retiró a descansar.
La mañana siguiente (muy temprano) a penas nos despedimos, debido al choque de nuestras agendas. Para ese fin de semana, tan sólo supe que un hombre que trabajaba en un programa de Asomavisión se había hospedado en mi casa.
En pocas semanas tuve la oportunidad de compartir un evento académico con Pablo, allí pude conocerle un poco más. Más adelante lo conocí como compañero de la Facultad Teológica del Seminario Bíblico Alianza del Ecuador, allí lo conocí aún un poco más. Sin embargo después de leer su obra “Ministros Enfocados”, es donde realmente conocí más acerca del ser humano y siervo de Dios, Pablo Gutiérrez. 

Recuerdo que en cierta experiencia académica me obsequio su libro y me dijo:
__ Será un honor que en medio de tantos libros por leer me leas
Pablo, después de leer tú trabajo, puedo decirte “fue un honor para mí, descubrir muchas lecciones de vida en aquellas páginas”.

¿Qué puedo compartir con mis lectores después de haber usado como libro de cabecera el libro de Pablo?

1. En el quehacer ministerial es fundamental que siervos con mayor trayectoria decidan intencionalmente invertir sus vidas en la formación de líderes más jóvenes en la obra del ministerio. “Ministros enfocados”, evidencia el resultado positivo de esta premisa. Se puede leer acerca de la relevancia que ciertos siervos de Dios tuvieron para la formación de Pablo (Teodoro Medranda, Frank Hankins).

Encontramos allí la primera lección: “Invertir nuestras vidas en las de otros”

2. “Ministros enfocados” compila varios temas (el equilibrio entre el ser y el hacer, las responsabilidades integrales del ministro, la mentoria, el trabajo con los líderes, etc). Cada uno de ellos es analizado desde la realidad académica-testimonial y además es factible para la lectura de un público muy diverso.
Este libro es pertinente para diversas realidades: escuelas de discipulado, trabajo de mentoria, clases en seminarios, estudios bíblicos, etc. 

Encontramos una segunda lección: “Construir/diseñar materiales que puedan servir para el estudio de los académicos y de los menos letrados”

3. Pablo nos permite descubrir un nuevo principio ministerial “el enfoque en el ministerio”. Escribe no tan sólo desde el arte de la publicación cristiana, lo hace desde décadas de formación. Sus escritos nos permiten contemplar el trato de Dios en su vida, y es desde ese trato  puede enfocarse en lo que mejor hace. 

En los actuales días, las librerías cristianas están llenas de libros que han sido publicados por autores que no han entendido un principio “el enfoque ministerial”. Pablo al contrario escribe y lo hace con base a su experiencia y formación.

Aparece así una tercera lección: “Enfocar nuestras fuerzas y energías en un tema en particular, desde allí estamos llamados a construir todo lo que se nos permita”

Finalmente puedo recomendar a mis hermanos del Templo Metropolitano, a mis amigos pastores y a mis estudiantes del seminario a consumir lo nuestro (un producto ecuatoriano de alta calidad).
Pablo, esperamos una nueva publicación, esperando que ella nos lleve a “enfocarnos ministerialmente”

Pr. Alexander Zambrano Macías
Portoviejo-Ecuador
11 de abril de 2016


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